Higiene personal, ¡ SIN AGUA !

Los hámsters son animales muy limpios en varios aspectos, ya sea por su costumbre de orinar siempre en un mismo lugar, la constante limpieza de su nido o por su meticulosa y diaria higiene personal. Gran parte de su tiempo lo dedica a su higiene, simple pero eficaz. Su higiene se basa en el continuo acicalamiento, ya sea con sus extremidades posteriores y anteriores o con lengua e incisivos.

Mucha gente me pregunta si hay que bañar a los hámsters. Esta duda se produce como consecuencia de no tener una información sobre los cuidados básicos. Antes de adquirir una mascota, ya sea hámster u otra, se deben de tener una básica información, para no ocasionarles problemas de ningún tipo. De no tenerla, la mejor opción es no aventurarse. El baño al que son sometidos estos hámster por parte de sus imprudentes dueños, se basa en llenar un recipiente con abundate agua, de tal forma que el hámter tenga que hacer de sus avazones flotadores improvisados, absolviendo y manteniendo aire en su interior y de esta desesperada forma mantener su cabeza fuera del agua, esto va acompañado de un continuo y desesperado pataleo, con el objetivo de aferrase a uno de los bordes y poder salvar su vida. Una cruel escena, acompañadas de risas por parte de sus dueños, como se puede comprobar en varios vídeos que circulan por la red.

Los hámters no están preparados genéticamente para ser sometidos a estos baños, lo que puede producir resfriados y caída del pelo como consecuencias más leves. La higiene que pueden recibir por nuestra parte es básicamente una limpieza de su jaula, mínimo una vez por semana. También podemos cepillarlo con un cepillo de dientes de cerdas blandas para una sensación mas agradable. Si su pelaje se mancha de alguna sustancia que no desaparezca ni por el acicalamiento propio, ni con el cepillo, podemos hacerla desaparecer con una toalla o trapo húmedo. Si aún no desaparece, podemos utilizar chapú para niños que no irriten los ojos. Otra buena opción es arena especial para baño de pequeños roedores. La arena para chinchillas es una buena opción. Debemos verterla en un recipiente lo bastante grande para que el hámster pueda girar y revolcarse. La arena les ayuda a mantener limpio el pelaje, eliminar la grasa de la piel y a gastar sus uñas. Hay que asegurarse que no contiene partículas de polvo, debido que pueden causarles problemas respiratorios.